La dana del 29 de octubre dejó al descubierto la falta de planificación en obras para frenar el riesgo de inundaciones en barrancos críticos. La Confederación Hidrográfica del Júcar proyectó actuaciones que nunca se llevaron a cabo.
El barranco del Poyo en Paiporta y el barranco de la Saleta en Aldaia son solo dos ejemplos de falta de ejecución de obras proyectadas desde hace años. La paralización de estas obras se ha debido a problemas presupuestarios y ambientales, especialmente en relación con la protección de la huerta valenciana.
Actualmente, se encuentra en la fase final de tramitación ambiental simplificada un proyecto para el acondicionamiento del tramo Aldaia-Nuevo cauce del Turia. Sin embargo, la incompatibilidad con la normativa territorial ha generado retrasos en su ejecución.
El Gobierno valenciano está trabajando en modificar la Ley de la Huerta para acelerar el desbloqueo de obras en barrancos como el del Poyo o la Saleta. Se busca eliminar obstáculos que impidan la actuación en estas zonas críticas.
Tras la dana, se ha establecido una colaboración entre el vicepresidente de la Generalitat, Francisco José Gan Pampols, y el presidente de la CHJ, Miguel Polo, para agilizar los trámites necesarios en la reconstrucción y reducción de riesgos de inundaciones en la región.
La coordinación institucional es fundamental para garantizar que los proyectos de reconstrucción avancen rápidamente y se minimicen los riesgos ante posibles inundaciones en el futuro. La colaboración entre ambas entidades es clave para lograr este objetivo.